DICCIONARIO DE TRIBUS Y GRUPOS ÉTNICOS DE AMÉRICA DEL SUR (10)
DICCIONARIO DE TRIBUS Y GRUPOS ÉTNICOS DE AMÉRICA DEL SUR
LOS JÍVAROS-SHUAR (2)
Indígena Kayapo.
Utilizando como moral el baremo
judeo-cristiano no cabe duda del salvajismo del pueblo Jívaro, lo era en el
siglo XVI y lo es en el XXI. Pero, siempre hay un pero, ese baremo no es válido
para sociedades sin disciplina filosófica, estamos hablando de un pueblo que va
desnudo, que corta las cabezas del enemigo, que las reduce y que las cuelga a
la puerta de su casa como trofeo y señal de su poderío. Estamos hablando de un
pueblo de cazadores-recolectores de antes de la Edad de Piedra, más bien de una sociedad de la Edad
del Fuego. Creen en lo que ven, en lo que sueñan, pero no llegan a filosofar
sobre un mundo sobrehumano, su mas allá no es más que el resultado de sus
experiencias alucinatorias producidas por un narcótico que extraen de la
Ayahuasca y donde sus chamanes o brujos interpretan bajo los mismos efectos
esas experiencias. No, no es justo ese baremo.
Desde el primer momento del
contacto, los Jívaros se vieron atraídos por los nuevos visitantes, sus ropas
que pronto empezaron a utilizar, sus herramientas, sus armas de fuego, etc.
Dejaron instalarse a los misioneros e incluso ayudan en el levantamiento de
iglesias, pero siempre a cambio de regalos, ropa, espejos, cuchillos, machetes,
abalorios etc., en cuanto estos regalos desaparecen dejan de acudir.
Las primeras reducciones,
encomiendas, eran lugares de formación tanto civilizadora como metafísicamente;
la civilizadora era una mezcla de militar, social y económica, la formación se
pagaba con trabajo y esclavitud. La metafísica era una injerencia en las
competencias de sus Chamanes. Los Jívaros no tenían ni palabras, ni conceptos para
dar figura a algo llamado formación. La concordia estaba lejos y prueba de ello
es la carta que los misioneros dominicos dirigen a su sede en Quito: "Difícil, muy difícil es la conversión de las
tribus Jívaras. El Jívaro es pérfido, astuto, soberbio, egoísta, interesado,
vengativo, asesino, amigo del ocio y del placer, enemigo de toda ley o traba
que obste a su absoluta independencia; embrutecido con lo material y sensible,
no aspira sino al utilitarismo de la vida presente. La Religión es un juego
para él, si de ella ha de sacar partido; hácese cristiano si le dais cuatro
varas de una tela insignificante, y con frenesí pide el bautismo diez o veinte
veces, aunque haya sido bautizado otras tantas, pero con la mayor impiedad,
renegando de la religión abrazada con tan fingido entusiasmo, mata luego al
enemigo que se le presenta, o sacrifica en aras de su furor la propia esposa, y
solicita a la vez la mano de tres o cuatro indias que más le agradan".
Durante casi cuatro siglos se abandonó todo intento de formación de estas
gentes.
Cuatro siglos es mucho tiempo, y
en ese tiempo pasaron muchas cosas; por un lado cambio el mapa político,
Ecuador alcanzó su independencia (1820), no cambió mucho el status de los
Jívaros, ni habían sido considerados ciudadanos por el imperio, ni lo serían
para el recién nombrado gobierno ecuatoriano. No ayudo mucho las
confrontaciones fronterizas entre Ecuador y Perú, en guerra para fijar sus
fronteras, y sus recursos, no olvidemos que estamos hablando del boom del
caucho, del que estas tierras eran ricas; tanto Perú como Ecuador armaron a
algunas tribus Jívaras que llegaron a enfrentarse entre ellas. El nuevo gobierno
ecuatoriano consideraba suyas todas las tierras y lo que hubiera bajo ellas y
consideraba legítimo su ocupación y explotación en aras del bien del conjunto
de la nación. En esa línea iba el discurso de su Presidente García Moreno
(1860-1865): No está lejos el día en que
tengamos que perseguirla (a la raza jíbara) en masa, a mano armada, para ahuyentarla de nuestro suelo y
diseminarla en nuestras costas, dejando libre a la colonización aquellas
fértiles e incultas comarcas. Para estas y otras partes despobladas de nuestro
territorio, obtendremos en breve una inmigración de alemanes católicos, si dais
al gobierno la autorización y los fondos suficientes.
Pero hay un hecho que no puede
quedar fuera de la ecuación que bien subraya el salesiano Juan Bottasso: "el hecho es que los Shuar han logrado
desarrollar un sistema de vida perfectamente adaptado al ambiente de la selva
tropical que resulta inhabitable para la mayoría de los demás seres humanos.
Del mundo vegetal han recabado los materiales para la casa, las armas, los
utensilios, el vestido, la alimentación...es decir todo lo indispensable para
vivir sin necesidad de depender de otros pueblos para ningún producto".
Tampoco la filosofía
judeo-cristiana es tan constrictiva a finales del siglo XIX como en tiempos del
contacto y la visión laica tiene su peso; el también político ecuatoriano Eduardo
Vásconez Cuvi expone claramente el porqué el mundo Jívaro merece ser parte de
la ecuación, y a la vez proporciona actitudes más "livianas" que la
anteriormente mencionada de García Moreno: "La sola riqueza de los Jívaros es su carencia de necesidades. Muchas
cosas que nosotros consideramos como indispensables y cuya privación nos sería
muy dolorosa, no tiene ninguna importancia, ni su falta significa nada para
ellos. Desde un punto de vista filosófico, esta carencia de necesidades
constituiría una capacitación para la felicidad muy superior a la obtenida
hasta hoy por la cultura blanca....La carencia de necesidades constituye un
verdadero desastre, ya que éstas son el motor central de la actividad económica
y la causa fundamental del progreso de la civilización. Pero no porque en las condiciones actuales de
su vida el Jívaro no puede satisfacer un número muy corto de necesidades, se va
a pensar que se encuentra embrutecido... lo que ocurre es que, imposibilitado
por su pobreza para satisfacerlas, se ha cuidado en no desarrollarlas y ésta es
su mayor sabiduría. ... El Jívaro si
tuviera medios suficientes, compraría canoas a motor, ordenaría establecer instalaciones
de luz y corriente eléctrica, adquiriría radiadores, y automóviles, amoblaría
su casa etc.(...) Y este es el solo camino de seguir para la asimilación del
Jívaro a la civilización del blanco".
El caso es que con todo y pese a todo
ciertas tribus consiguieron llegar hasta casi mitad del siglo XX totalmente
independientes, y mucho de este mérito se debe a un español, Alfonso Graña.
Este emigrante nacido en la localidad gallega de Avión llegó a Brasil a
primeros del siglo XX, más tarde se traslado a Iquitos, Perú, en donde trabajó
en la recolección de caucho principalmente. Tras la crisis del caucho en 1922 y
acompañado por un paisano se interno en la selva, ambos cayeron en manos de los
Jívaros. Alfonso tuvo mejor suerte que su compañero y sobrevivió al encuentro
gracias a que la hija del jefe se encaprichó de él. A la muerte del Apu, jefe
de la tribu, Alfonso fue nombrado su sucesor con el título de Alfonso I Rey de
la Amazonía y reino las tribus Jívaras de los Aguarunas y Huambisas hasta su
muerte en 1934. Alfonso les enseño a recolectar caucho y minerales con los que
acudieron a intercambiarlos por artículos de su necesidad, les ayudo mejorando
en muchos aspectos de sus vidas. Por fin
los Jívaros cogían el camino de la asimilación cultural.
Alfonso Graña, Rey de los Jívaros.
AÑECOCHES.- Indios pehuelches que se
hallan en las pampas, entre el río Colorado y los Andes. Asimilados.
AÑIRIRI.- Nación de indios del Paraguay
ya extinguida.
AOAQUIS, AWAKÉS.- Indígenas brasileños
que poblaron a orillas del río Uraricapara en el estado de Amazonas. En 1882
tan sólo quedaban 18 miembros y el censo del 2001 aún les daba 29 Awakés
repartidos entre Venezuela y Brasil.
APAGAYA.- Tribu indígena de Paraguay ya
extinguida.
APAKAMAS.- Subtribu de los Apamás, del
estado de Pará a orillas del río Maicuru. Extinguidos.
APAMÁS.- Tribu indígena brasileña que
vivía en las márgenes del rio Amazonas en su afluente Maicuru. En el transcurso
del siglo XVIII desapareció al igual que casi todas las tribus que habitaban en
la cuenca Amazónica y en la parte baja de sus afluentes, en su mismo caso están
los Tocantines, Cuchiuara, Caboquena, Guajara, Acajá, Uanapu, Aracaju, Tapuisu,
Pariqui, Guanavena, Tupinambaranas, Ibonamas, Turimás, Passé y Yuiguama entre
otros. En el estado de Pará.
APANIEKRA.- Tribu indígena perteneciente
al grupo Jé, que en la actualidad habita en el noreste del estado de Maranhao.
Vecinos de los Urubu y Guajá.
APANTES.- Indios que viven entre el lago
de Parimé y orillas del río del mismo nombre y cerca de la frontera con la
Guayana. Asimilados
APANTOS.- Tribu de indios tupis que
habitaba en las riberas del Marañón (Brasil). Fueron exterminados por los
portugueses.
APARAI, APALAI, APALAY.- Tribu indígena
brasileña que actualmente vive en el estado de
Pará, pertenece a la familia lingüística Aruak y es vecino de los Tiriy,
Maopityán, de los Katuema y Sikiana. Antiguamente ocupo extensos territorios en
las selvas de las cabeceras de los ríos Paru y Tombetas.
Indígenas Aparais.
APAUNUARIAS.- Pueblo amerindio compuesto
por varias tribus que habitaron a orillas del río Tapajoz. Fueron exterminadas
por los Mundurucu.
APECURIÁS.- Indígenas salvajes de la
cuenca del río Tapajoz, En el estado de
Pará. Exterminados por los Mundurucu que buscaban esclavos para los
portugueses.
APENARIS.- Tribu indígena de Brasil ya
extinguida que habitaba en las orillas del río Jurua en el actual estado de
Amazonas.
APERÚES, APERRÚES, IPERÚES O APIRAES.-
Indios cazadores que habitaban a la llegada de los españoles en una
comarca regada por el Bermejo o Grande, afluente occidental del Paraguay, en lo
que hoy es República Argentina. Extinguidos.
APETOOS.- Indios que vivían cerca del
Gobierno de Puerto Seguro, estado de Bahía en
Brasil. Extinguidos.
APETUPÁS.- Indios del Brasil que se
distinguían por su fuerte complexión y pequeña estatura. Extinguidos.
APETURY.- Subtribu de la nación
Mundurucu, que habitaba a orillas del río Tapajoz en el estado de Pará. Sus
restos como otras de sus subtribus se unieron a los Mundurucu propiamente
dichos y habitan en la desembocadura del río Tapajoz.
APIACÁS o APIAKÁS.- Pueblo indígena
compuesto por dos tribus. Una de ellas pertenece a la familia lingüística
Tupí-Guaraní y habita en la región de los ríos Apurina, Juruena. La otra
pertenece a los Karib y habita a orillas
del río Tocantins y su afluente Araguaia, estuvieron a punto de extinguirse por
las continuas guerras que mantenían con los Suyas. La tribu de los Apiacas del
río Juruena aún vive en las mismas
tierras que ocuparon antiguamente, su número no supera los 100 individuos que
niegan el contacto, habitando en el bajo Juruela y el bajo Teles Pires.
Sufrieron una matanza y desde entonces decidieron aislarse.
Indígenas Apiakas.
APIAGAS.- Indígenas que en los siglos XVI
y XVII habitaban en el departamento ecuatoriano de Morona-Santiago, en el curso
alto del río Pastaza y sus afluentes Llushin, Chuya Llushin, Palora y Chiguaza.
Pertenecían al pueblo de los Jívaros. Tenían como vecinos a los Abalicos.
APIAPETANGAS.- Tribu de indios del Brasil
que habitaban en el estado de Espiritu Santo. Fueron exterminados por los portugueses.
APICHIQUI.- Tribu indígena de Ecuador que
habitaba en la costa del Pacífico hasta el golfo de Guayaquil en el
departamento de Guayas.
APIEGUHEM.-
Subtribu de los Mascoi.
APINAGAS.- Tribu del grupo Cayapó que
habitaban en la región comprendida entre el Araguaia y el Tocantins.
APINAYES, APINAIÉ.- Tribu del grupo
Cayapó vecinos de los Apinagas, a partir de comienzos del siglo XIX se fueron
aproximando a los blancos, habiéndose convertido incluso en valiosos aliados
durante la guerra de independencia. Hoy los
Apinaye tienen localizadas sus aldeas en el municipio de Tocantinópolis, muy
próximas al área urbana, su número supera los 1000 individuos según el censo
del año 2003. Grupo Jé. Asimilados.
Indígena Apinaye.
APINGUI.- Tribu indígena Caribe que
habita en la margen izquierda del curso bajo del río Tocanstins, en Brasil.
Asimilados.
APIRAMA.- Nación de indios que habitaba
en Colombia. Extinguida.
APISANAS.- Indios que viven al Oeste del
Esequibo, en la Guayana
inglesa. Asimilados.
APITERE.- Tribu indígena de Brasil
perteneciente a la familia lingüística Tupi que habita en las cuencas media e
inferior del río Paraná. Extinguida como tribu independiente, sus restos se
unieron a tribus vecinas.
APOLISTAS.- Indígenas de la región
Norandina habitaban en la región noroeste de Bolivia y han dado su nombre al
cantón de Apolo, en la provincia de Caupilicán en el departamento de la Paz , comprende las tribus que
habitaban en el lado oriental de los últimos contrafuertes de los Andes y en
los llanos del noroeste de la república del Beni y engloba a las siguientes
agrupaciones: Amaguacos, Apolistas, Araonas, Caniris, Capechenes, Carupunas,
Cavineños, Conomanos, Cuseneris, Chagues, Chimanes, Chunchos, Espinos,
Guarayos, Hipurinas, Huachapiris, Machicagos, Lecos, Machiris, Maneteris,
Maropas, Mascos, Mosetenes, Ñaparis, Pacaguaras, Piros, Remus, Rupucurus,
Tacanas, Toromanas, Yamaluvas y Yurucares. La mayor parte de ellos fueron
asimilados prontamente.
APONAIRÁ.- Tribu que habitó en las
márgenes del río Madeira en las cercanías de la ciudad de Itacoatiara, vecinos
de los Anicore. Extinguidos.
APOTES.- Indios caribes que viven en las
orillas del Para, en el Brasil. Asimilados.
APOTOS.- Indígenas del estado de Amazonas
que habitaron en las inmediaciones del río Samuada (Yamúnda). Eran vecinos a
primeros de siglo XX de los Aparai en el norte del estado de Pará. Pertenecían
al pueblo de los Chaimas. Asimilados.
APUAS.- Indios que residen en el Estado
de Amazonas (Brasil).
APURINAS.- Tribu india de la familia
Aruak, que habitó en la cuenca del río Apurina, vecinos de los Apiacas. El
Área Indígena Apurina, un espacio
protegido por el gobierno brasileño, está
en el río Purus, más concretamente en su afluente Parana-Pixuma. En la
actualidad sus aldeas están enclavadas en la región suroeste del estado de
Amazonas próximos a las tribus de la familia Pano, de su familia (Aruak),
tenían como vecinos a los Canamari y los Deni., y también hay alguna aldea
Apurina en la cuenca del río Madeira, posiblemente de donde fuera originaria
está tribu y que se desplazara hacía el oeste presionados por los Mundurucus.
En la actualidad su número no sobrepasa las 50 personas ocupando las selvas del
alto río Sepatini. están parcialmente asimilados.
Reserva de los Apurinas.
APURONÂS.- Indígenas brasileños que en la
actualidad vive en el estado brasileño de Amazonas, relacionado con los
Tukanos.
APUYARES.- Tribu indígena del Brasil,
vivían errantes, eran muy belicosos y se cree que descendían de los Tabayares.
Extinguidos.
APUYES.- Tribu indígena ya extinguida que
habitaba en el interior del estado de Sao Paulo era vecina de los Amacaches y
de los Anovivis.
Miguel A. Valladares Álvarez.
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